Ibarretxe e Imaz en Foronda
 Para uno la llave de la normalización se fundamenta en el respeto al derecho a decidir. Para el otro es el momento de labrar un acuerdo integrador entre todos los representantes políticos y sociales. Continuar En las campas de Foronda volvieron los discursos made in PNV, es decir: contradictorios en las formas y complementarios en el fondo. ¿Fue así? Imaz se olvidó, por esta vez, de mentar la cosoberanía. El día anterior, en cambio, sentenció que ese de la cosoberanía es el discurso estratégico del futuro, y que antes que él fue el propio Arzalluz quien los sostuvo, y antes que éste el lehendakari Aguirre y la generación del 77, todo ello resumido en la frase talismán “sólidos en los principios, flexibles en las estrategias”. J.J. Imaz se tiene bien aprendido el discurso de San Ignacio, y en Foronda incidió en ello. Recurrió al símil de los entrenadores de fútbol con visión de jugada, para apostillar a posteriori: al día de hoy la normalización política será fruto de un pacto entre nacionalistas, federalistas y no nacionalistas. Para que no cupieran dudas de su condición abertzale recurrió, como es habitual en estos casos, a los inquebrantables principios nacionalistas del PNV "Nazioa eraikitzea". Ibarretxe fundió en un mismo paquete la estrategia y el objetivo ideológico último. Aunque, al igual que Imaz, abogó por un acuerdo interpartitario para la consecución de la normalización política, antepuso el derecho que el pueblo vasco tiene de decidir su futuro. Aireó, además, una reivindicación últimamente ninguneada: la consulta al pueblo. Tozudo como es, prometió cumplir su promesa de dar voz a la ciudadanía para que se exprese libremente. Ibarretxe recuperó del baúl de los recuerdos la Propuesta de Nuevo Estatuto, aprobada por mayoría absoluta en el Parlamento Vasco, para recordarnos a todos la célebre e histórica respuesta dada a R. Zapatero cuando éste le espetó con “convivamos juntos, decidamos juntos”, a lo cual Ibarretxe respondió: “para convivir juntos es preciso aclarar previamente si deseamos hacerlo”. ¿Discursos complementarios, discursos contradictorios, puesta en escena de la histórica ambigüedad del PNV, escenificación de un desencuentro, (…)? |
4 Comentarios:
¿Pero no vamos a conformar con nada?
Centrar un discurso político en obviedades como la necesidad de llegar a acuerdos los más amplios posibles, es no decir nada.
Afirmar que “la normalización política será fruto de un pacto entre nacionalistas, federalistas y no nacionalistas”, es no decir nada.
¿Se imaginan a alguien que dijera que la normalización política pasa por el necesario desencuentro de las fuerzas politicas y sociales?
No le tengo a Imaz por persona que se limite en un Alderdi Eguna a no decir nada así que me pregunto: ¿que quiso transmitir Imaz el domingo, al no decir nada?
Hace poco leía en un comentario de Arabatik que semejante discurso del presidente del EBB (“seamos buenos y lleguemos a acuerdos de todos con todos”) empieza a sonar parecido a la alianza de civilizaciones que predica Zapatero, y ciertamente es como para pensarlo.
Hay un detalle significativo:
Mientras el Lehendakari estableció un punto innegociable, como el derecho a decidir, el presidente del EBB hizo un canto a la renuncia en aras del acuerdo con aquellos que no piensan como nosotros. Oídos los discursos entiendo que el presidente del EBB podría dar por bueno un acuerdo con los socialistas que no incluya el derecho a decidir.
Todo un presidente del EBB no se lanza a la piscina sin agua, y menos un tipo tan astuto como Imaz.
Imaz ha apostado por la vía reformista, aún a sabiendas de que dos ejecutivas regionales están en contra y, lo que es peor, ignorando el mandato de la última ponencia política que le dicta con claridad cuáles han de ser las apuestas coyunturales y estratégicas a corto y medio plazo.
Intuyo que el sector Imaz tiene bastante elaborado un acuerdo estratégico con el PSOE, bastante más amplio que el relativo a la gestión presupuestaria o el devenir inmediato de algún ayuntamiento/diputación relevantes.
Dos cuestiones: La primera es que desde mi punto de vista, desaparece la ya famosa piramide invertida en la que se basa la estructura del Partido. Es decir,¿ Se plantea el EBB llevar el planteamiento de supresidente a las Asambleas Municipales para su ratificación? yo creo que no.
Segundo: Hasta el 31 de Julio todos los afiliados teniamos claro y asumida cual era la estategia, el plan presentado por el Lehendakari y la máxima "ser para decidir" (lo que yo interpreto como derecho de Autodeterminación).
¿ Quien revienta todo el Planteamiento ? Esta claro que JJI con su discursito.
El gran problema es que esto no es la Iglesia yaquí no hay dogmas de fe. Y los abertzales, los de verdad y no los de postal, (independientemente del partido en el que esten encuadrados) tienen claro su objetivo: Que Euzkadi/Euskal Herria y por lo tanto sus habitantes, sean los únicos dueños de su futuro y que su voluntad sea respetada. Es decir que la Soberania Nacional Vasca reside en el Pueblo Vasco independientemente del marco juridico-politico en el que circustancialmente o estrategicamnete nos encuadremos.
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